5/26/2014

Alimentos para un día difícil

Si la jornada se proyecta larga, llena de reuniones, tensiones y una pesada carga de trabajo, la idea es comenzar con los nutrientes correctos.

Alimentos para un día difícil
 Días difíciles se presentan todas las semanas. De cómo se enfrenten, depende salir victoriosas y menos cansadas o llegar al final de la jornada, agotadas y llenas de frustraciones. Además de un buen descanso y actitud, se debe prestar especial atención a la alimentación. “Consumir cereales, frutas, verduras, semillas es la mejor manera de conseguir mucha energía y sentirse bien”, explica la nutricionista Adriana Machado.

7 alimentos claves

Frutos secos: almendras y nueces. Ricos en proteína y tienen magnesio, clave en la conversión del azúcar en energía. Refuerzan el estado de ánimo.
Carnes magras: pollo, ternero, res, pavo. Tiene tirosina, un aminoácido que incrementa los niveles de dopamina, que ayuda a la concentración. Combaten el insomnio y la depresión.
Verduras de hoja verde: las espinacas son las más populares, reducen los niveles de estrés y ayudan a estar más alertas.
Cereales integrales: La fibra moviliza la digestión y eso causa bienestar. Lo mejor, hacen que el flujo de energía se constante durante todo el día. Habichuelas, frutas, pan integral, granos enteros.
Agua: la deshidratación está relacionada con la fatiga. Mueve el metabolismo, mantienen buenos niveles de energía, ayuda a eliminar toxinas. Beberla en intervalos regulares.
Avena y quinua: estos dos productos son los alimentos “perfectos”. Combaten el cansancio, ayudan a mantener el peso, mejoran la piel y aportan todas las vitaminas y minerales.
Chocolate negro: una ración diaria aumenta la energía, sube el estado de ánimo y no engorda. Es la mejor golosina para el día.

Lo que no debe comer
Alimentos dulces que provocan picos de azúcar en la sangre, causando fatiga y mal humor.

No se salte ninguna comida, por pesado que esté el día, no deje de comer. Si no puede almorzar, los frutos secos y bocados sanos le ayudarán.

Tomado de: El Espectador.com

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